En un futuro
lejano, el planeta es dominado por una diminuta civilización, capaz de clonar y
producir en masa a seres humanos de tamaño normal, llamados Surdlers, para destazarlos y reconstruirlos como vehículos, herramientas,
fuentes de energía, etc.
El manga se
divide en tramas que dan diferentes puntos de vista del funcionamiento de la
diminuta sociedad y la importancia de los Surdlers
en ella. Hay que mencionar que es un manga de Shintaro Kago: escenas grotesca e incomodas van a ser muy comunes;
así que no es un manga para todo el
mundo.
Estos mangas
por lo general no tienen un guion muy bueno y parataxis sigue esta tradición.
Muchas acciones de los personajes no tienen sentido y son forzadas, la esencia
de muchos arcos argumentales se repiten (como la constante busca del respecto,
para dar un ejemplo), los mejores momentos narrativos son cuando el autor se
centra en mostrar una narrativa más sutil y visual pero se podría contar con
los dedos de una mano las ocasiones en que sucede. Pero como
dije antes, es un manga de Shintaro Kago
y el plato fuere de su trabajo siempre ha sido su caprichoso dibujo.
El morbo de la historia proviene de la naturaleza material que le da la
diminuta civilización a los Surdlers,
mostrando un lado más despiadado e inconsciente de nuestra humanidad. Esto, junto con
el estilo característico del autor, embona de una excelente manera: alimentan
la perspectiva decadente que se quiere plasmar en la historia.
Puede que
parataxis no esté muy bien escrito, pero al terminar de leerlo no puedo evitar
sorprenderme por su naturaleza, el mundo donde acontece es exagerado y pomposo
pero contiene una personalidad tan poderosa que no me extraña que este
en alta estima en algunos círculos reducidos de lectores aficionados al gore.