Parece
que tuviera flojera… flojera de ser una película de ciencia ficción.
En un futuro azotado por
una nueva guerra fría. El científico Vincent McCarthy decide reclutar a Ava,
una joven eminencia en la creación de Inteligencia Artificial, en el Ministerio
de Defensa de Reino Unido. En su visita a las instalaciones, Ava muestra
oposición a los ideales bélicos de la institución, aspecto que molesta al
Director General del Ministerio. Vincent persuade a Ava explicando que planea
usar su tecnología para ayudar a su hija con síndrome de Rett, con esta
propuesta ella acepta el puesto. Para su desgracia, investigando en las
instalaciones, descubre abusos a soldados heridos, motivo suficiente para que
el director mande a un agente a eliminarla. Con Ava muerta, Vincent usa el
cerebro de ella para la creación de “la Maquina” un androide autónomo y suerte
de súper soldado.
En
un principio da la impresión de poder llegar a ser una película interesante: la
prueba de Turing y los colores para dar una percepción de seriedad; pero no
tardan en volverse las situaciones y personajes en clichés. Los personajes se
pueden catalogar como el científico incomprendido, la activista social, el jefe
malo, el robot con sentimientos y podría perdonarlo sí por lo menos los
desarrollaran, pero el único que va del punto A al punto B es la máquina; y
desde el principio ya lo ves venir.
Es
el clásico: “la rebelión de las maquinas”, aunque en este caso son transhumanos
(única novedad que da a la formula). No hay mucha sustancia en los diálogos ni
en las acciones, solo conversaciones vacías. Pareciera que los personajes
esperan que la película continúe para que los barran a la siguiente escena.
Por
lo menos los efectos especiales son decentes y son los protagonistas de las
mejores escenas; muchas de estas metidas a calzador. Si vas a ver esta película
es solo por esto.
Una
película sin gracia e impacto, si no estás acostumbrado a este género te
parecerá pasable. Hay otras películas con esta misma premisa que lo hacen mejor
y The Machine no vale el tiempo que
inviertes en él.