Patrick McHale y Cartoon Network nos traen su primera miniserie realizado por el
estudio desde su creación. Over the
Garden Ward llega a posicionarse sobre todos sus antecesores (incluso en trabajos notables como Hora de
Aventura y Regular Show) donde
solo los puntos de referencia válidos para compáralo son trabajos de casas
animadoras de la talla de Disney e
incluso Studios Ghibli.
Wirt y su hermano menor Greg se han perdió en Lo Desconocido un lúgubre bosque mágico. Mientras que el dúo de hermanos busca su camino de regreso a casa, un ente maligno llamado La Bestia busca agotar las esperanzas de los chicos y así convertirlos en árboles para sus ruines planes.
Puede que en
un principio el argumento suene muy simple y sacado de algún cuento clásico
que hayamos oído hasta el hartazgo en nuestra infancia, pero no se dejen
engañar por su lado superficial, porque detrás se nota el trabajo ambicioso de
una persona que se esforzó en plasmar su historia y visión; y ese aspecto es
algo que cada vez se va perdiendo en los medios artísticos de hoy.
El trabajo
artístico esta excelentemente ejecutado, planos detallados con una paleta de
colores que logra un ambiente otoñal; y otorga a la serie cierto tono mágico y
oscuro que queda como anillo al dedo con su lúgubre narrativa. En cuanto a los
diseños de los personajes tanto secundarios como principales son muy sencillos
comparados con los fondos, pero los refleja con mucha naturalidad: tanto sus
características corporales como emocionales. Dando al tono artístico un
contraste equilibrado entre las sencillez de algunos de sus aspectos y su
detallismo en otros.
La narrativa
es precisa y bien ejecutada, el estilo narrativo está basado en los cuentos de
fantasía infantiles y pero aderezada con conceptos lúgubres y que a primera
vista parecen tener doble sentido (muy común en Cartoon Network) pero con el pasar de la trama ira tomando forma
mostrándonos con más claridad la historia.
La historia
es memorable y profunda, detallada en casi todos los aspectos que toca, los
diálogos son bien estructurados y sofisticados aumentado la calidad narrativa;
las situaciones en que se ven inmersos los protagonistas, el lúgubre contrastes
de la melancolia, el mal y la inocencia, los carismáticos personajes con los que se
topan y el rumbo que toma la historia desde su clímax hasta el final es
brillante.
El aspecto
sonoro esta hecho a la perfección; los sonido de fondo, los musicales, las voces
de los personajes y hasta el narrador son perfectas, aunque en un futuro salga
doblada en castellano creo que no superara a la inmersión en que da oírlo en su
idioma original.
Puede que
algunas personas (tal vez por los primeros capítulos) crean que sea aburrida y sosa.
Incluso en un principio yo creí que las alabanzas que le lanzaba la crítica
eran mera sobrevaloración para los estándares en que la colocaban, pero hay que
verlo de principio a fin para notar la perspectiva tan trabajada que Patrick McHale nos quiso transmitir.
Para concluir
diré que es uno de los mejores trabajos de animación que he visto salido
de los estudios de Cartoon
Network y llega a sorprender el estilo y la calidad de la serie que difiere
mucho de sus demás trabajos.